miércoles, 21 de marzo de 2012

¿Por qué no recibí el Espíritu Santo?

Porque no creyó. “El Obispo no sabe lo que está adentro de mi corazón.” Sí que lo sé. Él es un pozo de sentimientos, en él sólo hay emociones. Inclusive la fe. Fe emotiva. Ese tipo de fe es la responsable de que el 90% de los creyentes sean incrédulos y estén enfermos espiritualmente.
Cuando se cree de forma racional, no hay nada que pueda impedir el recibimiento del Espíritu de Dios.

¿Sabe por qué?
Porque nadie tiene más interés en sellar con el Espíritu Santo que el propio Hijo de Dios. Inclusive, Él ya Lo envió para los que creen. O sea, hay que darse, rendirse o entregarse de cuerpo, alma y espíritu en Su búsqueda. ¡El candidato tiene que querer REALMENTE! Y tiene que probar esto. Tal vez usted haya creído pero no de forma racional. Creer es como estar de novio. Estar con alguien o estar de novio sucede sin cualquier compromiso. Tal vez esta sea la situación de muchos. Están de novios con el Espíritu. Por su parte el creer racionalmente involucra un compromiso serio. Casamiento. Entrega incondicional. Creencia que asume compromiso definitivo, que incluye sacrificar la buena vida de soltero. Ese tipo de creencia racional  toca el corazón de Dios y trae la respuesta inmediata. La persona que cree racionalmente asume el compromiso de abandonar definitivamente el pecado por Él.

¿No es eso lo que el casamiento exige?
Los cónyuges renuncian a la libertad de la vida de solteros para comenzar una nueva vida de obligaciones, responsabilidades y sacrificios.
Si no hubiera esto, ¿cómo podrían continuar juntos?
El casamiento o recibimiento del Espíritu de Dios depende de que el candidato renuncie a su libertad para servirlo. La falta de disposición a renunciar a todo lo que hay en el corazón, tal como: hijos, padres, familia, novio, casa, carrera, profesión, bienes, religión, en fin, todo para recibir el Espíritu Santo, prueba que no se cree. Quien no sea arrojado en la fe como Abraham jamás puede exigir de Dios más de lo que Le ofrece.

Obispo Macedo

No hay comentarios:

Publicar un comentario